〔Bastian〕 De pronto se hizo la paz entre Cee y yo de una manera que jamás pensé qué pasaría. A pesar de la pequeña situación que tuvimos en la cocina hace unos días, ésta no pasó a mayores y los dos pudimos continuar, como “normalmente” lo hacemos. Sin decir nada, una tregua se hizo entre nosotros, permitiéndonos hablar sin ganas de aventar todo por la borda y querer salir huyendo por completo, ahora lo hacemos con respeto y puedo decir que un poco mas de amabilidad. El resto de la semana, ambos estuvimos llevando “una vida normal” cada quién a su tiempo, a su paso y sin interrumpir lo que hacía el otro. Cécile y yo comenzamos a ver las asociaciones con las que podríamos renovar los contratos para brindarles el apoyo que necesitaban e investigamos nuevas que podríamos ayudar, especialm