Cristián abrió la puerta del baño para salir al pasillo y tomó su celular. Leo respondió al segundo tono.
– Hola.
– ¿Qué estás haciendo?
Leo también estaba en el baño – me estoy rasurando, hice una pausa para responderte, ¿qué quieres?
Cristián rodó los ojos – sabes a qué me refiero, ¿qué estás haciendo?
Leo bajó el celular, activó el altavoz y continuó rasurándose – mi habilidad para leer mentes solo funciona los martes y los viernes.
Cristián salió al balcón y buscó un cigarrillo – fingiré que no escuché eso. Hablé con mi compañera, Luisa. La que abrió una empresa de desarrollo de software, dice que trabajó con una clínica de dermatología, pero cancelaron su propuesta de diseño y todavía tiene las plantillas. Puede hacer la edición y tenerla lista en una semana.
Leo tomó la toalla
