Capítulo 19.
Maxine terminaba de bañarse, era domingo en la tarde y ella quería arreglarse un poco, no sabía que cosa le harían en aquel salón, tal vez un peinado, un maquillaje, ella no lo sabía.
Se miró en un pequeño espejo, arrugó la cara al ver las cejas tan pobladas que tenía, nunca antes se las había depilado, tomó un saca cejas y cuando sacó la primera, pegó un grito.
—No, olvídalo Maxine— se dijo así misma.
Fue a buscar ropa y encontró unos pantalones holgados de mezclilla, eran los pantalones que siempre usaba los fines de semana, se puso una camisa amarilla de mangas largas y se hizo las dos trenzas que acostumbraba traer.
Se puso unos zapatos negros de charol y se miró al espejo.
«Ridícula», era verdad, a Maxine no le gustaba vestirse de ese modo, pero tampoco se anim
