Scarlett

Capítulo 12

—Probablemente, aunque usted, tampoco parece ser una chica con dignidad—le respondió muy divertido, porque volvió a reír suavemente, mientras la miraba de arriba abajo escudriñándola—no después de rogarle a un hombre tan cobarde como Brando Davis.

—¿Cómo se atreve hablar así de él?—gritó Scarlett dudando de si debía seguir guardando compostura.

—¿Y dice usted que va a odiarlo toda la vida?—se mofó Bucker mientras volvía a arrellanarse sobre el sofá

Si hubiese podido matarlo, lo habría hecho, pero en lugar de eso, salió de la habitación, tratando de alzar del piso los fragmentos de la dignidad que había dejado en aquella habitación. Volvió a la fiesta y se reunió con sus amigos, los chicos que nunca la lastimarían o al menos eso pensó, pero Brandon quien era el chico más dulce que jamás había conocido, le había destrozado el corazón, que podía esperar de ellos. Intento no pensar en nada más mientras avanzaba la tarde y solo de esa forma el sufrimiento empezó a disminuir.

Para la noche, los latidos del corazón eran regulares y tranquilos, ya había pasado el mal momento no solo con Brandon, sino también por ese insufrible hombre que no valía la pena mencionar, bailo con cada hombre que se lo pidió, tratando de olvidar y divertirse, para cansarse y evitar tener que pensar en Brando después de llegar a casa, al encerrarse en su habitación, pero aquella actitud libertina le valió los comentarios de cuanta chica se encontraba en la fiesta.

—Me parece que Scarlett se ha portado hoy como una descarada—le escucho decir a una chica al mientras se dirigía al tocador de damas, el grupo se encontraba descansado en un pequeño saloncito donde podía observar el baile y las parejas que danzaba con alegría sobre la pista en el jardín, se quedó en el pasillo interesada en escuchar lo que decían de ella.

—Me parece que solo está disfrutando de su juventud—escucho la voz melodiosa de Melanie—todas las chicas deberíamos seguir su ejemplo, para diferenciar a los hombres buenos de los tontos.

Scarlett arrugó los labios al verse defendida por esa hipócrita que se decía su amiga, pero que ni ella, se había atrevido a contarle nada sobre su compromiso y aun en la fiesta se habían mantenido alejada de ella.

Scarlett no había tenido jamás confianza en ninguna mujer y rara vez la depositaba en alguien, porque habia aprendido que por causa de su belleza y la fortuna de su padre, la mayoria de chicas que atraia eran hipocritas y egoístas, aunque Melanie, siempre le habia parecido alguien dulce que no podia matar si quiera una mosca, pero al final la desgraciada la habia traicionado.

—Se honesta—le dijeron a Melanie

—Sabemos que solo hablas con ella porque tu padre y el suyo son grandes amigos, pero no debes pretender ser su amiga si no quieres.

—Soy su amiga porque asi lo deseo y no tiene nada que ver con mi padre o el suyo—protesto Melanie defendiendola de los ataques de sus primas.

—¿No has visto cómo coqueteaba con todos?

—No veo cual es el problema—insitia Melanie— si todas nosotras tuvieramos la mitad de belleza que ella tiene, hariamos lo mismo que ella y nos sentiriamos orgullosas

—De ser hermosa como ella, no seria tan atrevida y desvergonzada

—Por supuesto que no hay problema si se trata de cualquier chico—murmuró con misteriosa importancia—pero si se le insinuara a Brandon la cosa cambiaria ¿No es asi?

Scarlett se sintió helada por el temor de ser sorprendia y la humillación que representaria que las personas se enteraran de lo que habia sucedido esa precisa tarde. Su prima Lisa era una estúpida, una cretina, una simplona que unicamente le tenia envidia. Gracias a que su orgullo estaba ofendido por el rechazo de Brandon y para rematar por la descortesia de Rhett Bucker quiso irse de ahi, no tenia importancia lo que dijeran Melanie o sus parientes. La voz de Melanie, mesurada y tranquila, se levantó sobre las otras en son de queja.

—Sabes muy bien que Scarlett no podria hacer algo como eso, Lisa, y no está bien que hables así...

—Es así, Melly, si al menos la pudieras ver como nosotras lo hacemos. Scarlett O'Donnel no es mas que una buscona que anda detras de los novios de las demas. Sabes muy bien que ha separado a Stuart de mi hermana y hoy ha intentado seducir a tu hermano e incluso a Brandon, hoy se lo llevo de la fiesta muy sospechosamente.

Debo irme a casa, pensó Scarlett, antes de que esa bestia que residia en su cuerpo y que ultimamente no habia podido controlar, se precipitara an entrar en la habitación para agarrar a lisa por los cabellos y escupirle en la cara, que ella no era una cualquiera como ellas lo insinuaban, pero aquel pensamiento tentativo era demasiado vulgar de realizar incluso para ella, por lo que comenzo a caminar con sigilo y retrocedió como un animal asustado. Si idea era salir de ahi y ordenarle al cofer que la llevara de vuelta alegando que se sentia mal de la cabeza, Nanita la entenderia una vez que la viera devastada, pero al llegar al vestibulo se detuvo, no podia darles la razon a esas arpias, debia soportar el veneno que escupian de ella y aguantar la humillación de su corazón.

Por el momento, Brandon habia dejado de tener su propio pedestal en su corazon, como tal aun no era olvidado, pero ya no era el joven soñador del que ella estaba enamorada. Ahora era parte de los Wilson y de Doce Acres, pero Scarlett los odiaba a todos porque se reían de ella.Su padre le habia enseñado hacerle frente a sus enemigos y mostrar una sonrisa cuando le creian derrotada y eso mismo haria.

No iré a casa, pensó mientras hacia el esfuerzo por volver a la fiesta como si no hubiese escuchado a la primas de Melanie hablar de ella. Se sento con su grupo, al lado de Charles y una vez ahi, él la tomo de la mano y entrelazo sus dedos con los suyos, estaba ya un poco pasado de copas como para atreverse a tener tal actitud con Scarlett, pero a ella no le importo, de hecho se sintio extaciada de tener una razon mas para hacer enojar a la primas de Melanie y esperaba que la estuvieran viendo justo en ese momento.

—¿Donde estabas? —gritó en medio del escandalo de la musica

—Disculpa, habia fila—se excuso mientras acomodaba su cabeza sobre el hombro de Charles. El pobre hombre sintio que el alma se le iba del cuerpo, al creer que habia muerto y habia despetado en el paraiso

—No te preocupes—le dijo él confundido por su actitud, aveces era muy cercana y otra veces no parecia notar su presencia y eso no solo le sucedia a él, sino a los demas chicos, era como si Scarlett no estuviera decidida a darle completamente su corazon a nadie.

Charles la miró fijamente, la belleza de su rostro brillaba entre las luces de colores que danzaban en la pista de baile y sus ojos verdes brillaban como si fuesen esmeraldas. No había visto un fuego parecido en la cara de ninguna muchacha, ni tal esplendor en los ojos de nadie.

—Soy un bruto por creer que alguien como tu podria querer a un tipo como yo—dijo él sintiendose culpable de amarla como lo hacia.

Ella levanto su cabeza de su hombro y lo miro con ternura, Charles quizas no era un gran tipo, pero al menos era sincero, algo que Brandon jamas habia sido, asi que sintio que debia pagarle de alguna forma su sinceridad, quizas un beso, de esa forma mataba dos pajaros de un tiro, a Charles y tambien al grupo que acompañaba a Melanie desde el interior de la casa, asi que sin que él esperara nada, Scarlett le planto un beso sobre los labios silenciandolo por un breve instante.