Cassandra
Siento un calor indescriptible por todo mi cuerpo, las sábanas se pegan a mi piel de una manera que me hace sentir más incómoda de lo que ya estaba.
¿En qué momento me quedé dormida? ¿En dónde estoy? ¿Qué hora es?
Unos rayos del sol traspasan las cortinas y un suave viento me arrulla como si estuviera cantando una canción de cuna, entumeciéndome.
Abro un ojo perezosamente y lo primero que puedo captar son mis sabanas de color marrón.
¿Desde cuándo mis sábanas son de ese color?
Extrañada, tomo entre mi mano un extremo y la analizo detenidamente durante unos segundos, pero un brazo rodea mi cintura por la parte del frente y me acerca a un torso duro, chocando contra la parte baja de mi espalda y es cuando me doy cuenta dónde estoy.
En la habitación de Liam.
Anoche… más te
