Julio
El sonido de mi teléfono me despertó a media madrugada, Mía dormía sobre mi pecho, su respiración era apacible y serena. No era de extrañarse que una criatura tan bella como ella descansara de esa forma. La moví suavemente, su cuerpo instintivamente buscó acomodarse del otro lado de la cama, suspire al verla tan lejos de mí, pero ese sonido no cesaba.
Me levante de mi sitio y busque mi teléfono móvil dentro de mi pantalón. Aun tenía pendientes algunos asuntos en singapur por lo que mis empleados solían llamarme cuando se presentaba una situación, tenian permitido interrumpir mi sueño si necesitaban mi asesoria, pero en ese momento los maldeci para mis adentros.
Al mirar la pantalla de mi teléfono descubri que no era ninguno de mis hombres, de hecho era un número desconocido, pero
