El lugar que le indico está cerca de la tienda de arte donde trabajo. Para mi es el mejor sitio para comer griego y su dueño es muy amable.
Entramos a Dionisios no puedo ocultar la alegría que me sentir los olores de mi tierra. El lugar tiene sillas azules y mesas con manteles blancos. Hay murales de la isla. Los techos son altos y se pueden ver las vigas de madera donde cuelgan lámparas negras el lugar está lleno de comensales.
—Kalos Irthate (Bienvenida) —Dioniso camina hasta nosotros.
—Pos ísoun (¿Cómo has estado?) —respondo el hombre edad avanzada, pero se mantiene bien y lleva su negocio con mano firme.
Asegura que cuando ve a una compatriota prefiere hablar en griego. Extraña sus raíces.
—Tóra. Kalýtera (Ahora. Mejor) —responde— Thélete trapézi (¿quieren una mesa?) —Mira a Der
