Los artículos del día a día no habían parado, no dejaban de indagar sobre el pasado oscuro de Johann Davidson y su prometida Sara Brown. Sara no había tenido la oportunidad de leer ninguno de ellos, mientras que Johann por su parte era quien los leía primero, aunque esta vez se hablaba más de Sara, de alguna forma los buitres de las noticias habían logrado dar con información relevante sobre Sara, lo cual enfurecía a Johann, no espero que Sara despertará por la mañana y le mostró aquellos periódicos y revistas como de costumbre, él prefirió alistarse e ir directamente con sus abogados, dejandole una nota de disculpas a Sara. — Entiendo su enojo señor Davidson, pero me dice que nada de esto es falso, podemos hacer que se disculpen, pero la señorita Brown no puede demandar por calumnia, s