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1748 Words
Annette —¿Pero quien es este hombre?— La puta, la puta de Jennifer, se acercó pavoneando su culo de silicona. Miro de arriba abajo al hombre que aún mantenía su agarre de acero sobre mi— Vamos, cariño, no te gustara follarte a esta zorra— Me señaló con sus uñas largas y mal pintadas. Me cagaba en ella. Jennifer era una mujer llena de silicona en las tetas y culo. Podía apostar que se había follado ya a media arena, y que su coño estaba más abierto que un agujero en el piso. Su cabello lo había teñido de negro, y siempre mantenía el rojo fuego en sus labios. La puta, solo era una copia barata de mi. — Piérdete que aquí nadie te hablo— Dije. Se acercó a mi y con sus uñas de bruja, trazó una línea vertical sobre mi escote, jugando. La mujer quería intimidar, pero no intimida ni a una mosca. — Solo eres una zorra, una zorra que si no tuvieras la belleza, ni el padre que tienes, serias basura —Sus palabras me las pasaba por el culo— Por que sin Cameron Black, no eres nadie, puta— Mis dientes rechinaron con fuerza , apreté mi mandíbula con rabia queriendo destruirle la cara de mosquita muerta. — Mejor controla tu celo, perra— Dije. Lo que más me hacía enfadar, era la manera en la que sonreía, como si supiera cuales fibras sensibles tocar. Yo no permitía que me pisotearan, nadie y menos una perra con aires falsos de una patética "grandeza". — Ann, no — Ignoré el llamado de advertencia de Lott y me abalancé sobre la puta—¡Annette! La puse de rodillas a fuerzas y empujones, pero la obligué arrodillarse, por que las personas como ella, tienen que besar y lamer el suelo que yo piso. La sujete de su cabello e incline su rostro para que apreciara el mío. — Mírame— Le susurre— Tuviste que haber nacido de Annabella Black para parecerte a mi, pero afortunadamente, mi madre no es la tuya. Y jamás lograrás ser igual que yo. Tatúatelo en la puta cabeza vacía que tienes.— Le saque la navaja que ella traía en su bolsillo y la acerqué a su boca. — Annette— Lott volvió advertir dando un paso adelante, pero el hombre de cabello rubio , se interpuso sonriendo. — Adelante, conejita. Quiero ver como tus manos se llenan de sangre— Ignoré su comentario y me enfoque en la mujer. —Suéltame— Sus lloriqueos incrementaban el placer que sentía cuando veía a una personas sufrir. Era tan placentero... — A las perras se les amarra y se les corta la lengua para que no ladren—La navaja rebano su lengua armando un río de sangre. La derrumbe sobre el suelo para que siguiera su lloriqueo. El hombre se acercó a mi con sus ojos oscurecidos. —Tú y yo salimos del mismísimo infierno, conejita— Tomó mi rostro entre sus manos grandes y me observo, mejor dicho, me analizo— Pero te arrastrare de vuelta a el— No despegue mi mirada con la de él, si lo hacía, él sabría que podía llegar a intimidarme. Y que un cazador vea eso y lo sienta, no es bueno, por que sabrá que eres presa fácil. Y yo solo soy presa de mi misma—Te observo, así que cuida cada paso que das. Si me entero que volviste a follar con otro, te lastimare. — Púdrete, cabrón. Yo follo con quien yo quería— Me aleje de él y pase a lado de la puta patiandola antes de marcharme de ese lugar e ingresa a la Arena. Lott se acercó a los pocos minutos y comenzó con su sermón. — Sabes muy bien que Jennifer es hija de uno de los socios importantes de tu padre— Me encogí. — A mi padre le importa un centavo sus socios— Lleguemos a la zona VIP y yo me dejé caer sobre el mueble de terciopelo rojo. Un mesero se acercó con una bebida para mi y para Lott. — Aún así— Moví mi bota con impaciencia sobre la alfombra de la zona. Las palabras de ese sujeto, me martillaban una y otra vez en mi mente. No le tenía miedo, pero si debes tener cuidado cuando un asesino entra en tu perímetro y promete ser un martirio en tu vida— El padre de ella tomara represalias por lo que le hiciste. — Solo es una puta lengua, que se la peguen y ya— Tome del vodka con fastidio. Trague grueso cuando vi llegar a mi padre. Con tan solo su maldita presencia ponía a temblar de miedo a los trabajadores y personas de la arena. Él imponía miedo. — Annette— Me hice aún lado para abrirle paso y que tomara asiento, después de todo, él seguía mandando. No saludó a Lott, solo tomó asiento y pidió una bebida con desagrado, se dedicó a observar la pelea que estaba presentando al público. — ¿Necesitas algo?— Pregunte haciéndome la desinteresada mirando mi tatuaje en mi antebrazo. —¿Donde está Caín?— Pregunto sin mirarme. — No soy niñera de ese idiota— Me trague la risa cuando escuche carraspear a uno de sus hombres. Les incomodaba que le hablara de esa manera, pero vamos, es mi padre. A mi no me mataría por contestarle de esa modo. —Nunca dije que lo fueras—Respondió esta vez mirándome con su seriedad. Después me ignoro como suele hacerlo, no solo conmigo, también lo hacía con otros. Que puta maldita falta de respeto, pero puedo jurar que nunca ignora a Annabella. Rick apareció luciendo una camisa negra ajustada que hacían lucir los troncos que tenía como brazos. Llegó fulminando a los hombres que estaban a mi lado haciendo guardia. Les lanzó una mirada y ellos inmediatamente se movieron a un lado. Tomó asiento a mi lado , muy pegado a mi. Me burlé en mi interior, el buenote del rubio hacía eso para marcar territorio. Pero ninguno de estos idiotas querrían a un suegro que no estaba en sus mas buenas facultades mentales. Caín llegó tiempo después, sin sus nuevas mascotas. —¿Pelearas? — Pregunte aburrida. Él asintió. El ruido del lugar incremento. Los gritos de euforia inundaron el lugar lo que me hizo ponerme de pie y ver el alboroto que se había armado. Busque la razón por la cual las personas se habían alborotado. Me tensé cuando lo vi. —¿Que hace Kaden,aquí? — Mi padre lo tomó como algo aburrido y para Caín, para él fue como si le hubieran vaciado un galón de gasolina y prendido fuego. Ellos se odiaban , y podía entender el porqué. Caín dio un paso adelante desafiante, pero Cameron lo detuvo. —¿Que? — Caín ladró—¿Lo vas a defender al hijo de perra?. — No tengo por que darte explicaciones, aplasta tu culo en ese mueble— Era una jodida mierda convivir con dos hombres con el mismo carácter. Agradecida estaba con el de abajo, por que Kaden no vivía con nosotros , sino, una puta bomba nuclear haya detonado en nuestra vivienda. — Solo por que es el niño de mami, ¿no?— Me trague la carcajada— Solo por eso no quieres que le arruine la cara— Con el simple hecho de haber mencionado a mi madre, mi padre lo tomó del cuello y lo lanzó sobre la mesa. — Cierra la puta boca — No te gusta escuchar las verdades, Cameron— Caín se levantó y se limpió la sangre que bajaba de su mejilla— Pero nuestro odio nació por culpa tuya. Lo mandó a callar una vez más , golpeándole el labio. — ¡Anda!— Elevó su voz. Caín le había tocado las pelotas a mi padre y eso no era bueno— Ve y rómpele la cara al niño de mami como dices tú, si es que puedes, cabrón. Sino, va hacer él el que te la rompa a ti. —¡Señores! — Rodé los ojos ante el grito del presentador—¡Tenemos a un invitado especial!— El gritó de emoción me hizo rechinar los dientes. No comprendía por que carajos él estaba aquí. No había razón alguna para que estuviera aquí—¡La casa recibe a Kaden Black! — La irá de Caín era palpable en el aire ante esas palabras, mi hermano mayor dominaba la arena y que Kaden llegara a invadir su territorio, era jodidamente malo. — Tranquilízate—Tanto odio entre hermanos no podía existir, y nunca lo había visto hasta ahora en ellos dos. —Solo está de visita — Dije. —¡El campeón de las grandes ligas, subirá al ring y demostrará por que es el rey de los guantes—Puto presentador y sus discurso barato. Como lo dijo, kaden subió al ring preparado. Su mirada oscura cayó sobre Cameron y Caín como ametralladora , devorándolos con odio. Los hombres tomaron a Caín mandándolo al suelo por órdenes de mi padre. Cinco bestias sujetando a un monstruo que estaba fuera de su sano juicio. — Hijo de perra— Fue lo que escuche de él— Algún día lo mataré, Cameron — Mi padre solo bufo ante las palabras de su primogénito— Y lo voy a disfrutar. — Por supuesto, estaré en primera fila viendo como los dos se hacen mierda— El sarcasmo de mi padre era tan... parte de él—Pero sabes que a ella no le gustará verlos matarse entre sí. —¡Me importa una mierda lo que a ella le disguste! Kaden se enfrentó contra un hombre de su misma altura y pesó. Al minuto cinco lo derribó, lo tomó del cuello y mirándonos,lo mato. Como si deseara hacer lo mismo con nosotros, en especial con el padre y el hijo. —Dice ser diferente a nosotros— Hable burlona— Pero es una mierda más— Mi padre sonrió negando. Kaden bajó del ring y caminó hasta llegar a nosotros. Los hombres levantaron a Caín sin soltarlo del todo, una vez que lo soltaran, Caín podría llegar armar un verdadero caos y preferían evitar desastres o una verdadera tragedia. — Niño de mami— Caín murmuró entre dientes — Niño de papi — Kaden soltó con rabia
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