James y yo sabíamos que ahora que yo conocía toda la verdad acerca de quien era la culpable no me permitirian ser una cazadora, sobre todo porque Robert es quien autorizaba las aceptaciones y vi por pérdida la idea de ser una Cazadora por los medios convencionales, así que James arreglo todo, me habló sobre un hombre que era amigo de su padre que había desertado de los Cazadores y lo habían puesto en el exilio desde hace varios años y odiaba a la asociación;no habría ningún problema en que el me entrenara; le envió una carta la noche en que me juro lealtad y respondió de inmediato, el me aceptaría bajo algunos términos que tendríamos que discutir en nuestro encuentro; pero James y yo tendriamos que salir de inmediato del quinto distrito de la asociación un lugar casi abandonado que tenia l
