Kendall Como todos los días me levanto de mala gana y arrastro los pies hasta el baño. Otro día de clases. Al entrar al baño me desvisto el pijama y aun con los ojos cerrados entro a la bañera y giro la perilla de la ducha, inmediatamente el agua cae sobre mí haciéndome dar un salto casi fuera de la bañera. ¡Está helada! Y por desgracia no tenemos agua tibia en casa. Por lo menos no desde hace unos años, cuando mi familia tuvo la crisis y mi papá perdió todo su dinero y posición social. Vivimos modestamente, no soy hija única, tengo dos hermanos. Un hermano mayor y una hermana mayor, pero mi hermana se casó con un hombre adinerado y al momento de la crisis nos abandonó, ni siquiera nos ayudó con los gastos legales para defender a mi padre por la acusación de fraude. Simplemente se fue