Unos meses después de la guerra mis padres por fin han decidido nombrar a Zack rey de los licántropos, ahorita estamos a tan solo unas horas de su boda y su coronación por que debe estar casado con su mate antes de ser nombrado rey, estoy en la habitación con Amara que no deja de dar vueltas con su vestido de novia. — Ya me maree, Amara por favor para— ella se detuvo, se le notaba a kilómetros su nerviosismo, pero estar dando vueltas de un lugar a otro no iba aliviar su nerviosismo. — Lo siento, lo siento pero estoy muy nerviosa— rodé los ojos. — Solo es tu boda y tu coronación— ella me mira molesta. — Claro como no eres tu la que está pasando por esta situación no estás nerviosa pero que si lo estuvieras estarías peor que yo y yo no te estaria regañando— suspire, tenía razón. —