Mientras que Alejandro daba vueltas en su oficina esperando a que Sophia fuese a llevarle un informe que le pidió, se preparaba mentalmente para cualquier cosa, si ella sabía que él era el padre de su hijo, debía estar alerta, en cualquier momento podía soltarle la verdad y pedirle dinero para chantajearlo, pero no se dejaría chantajear, nadie jamás había podido asegurar que pudo en cuanto a negocios ganarle a Alejandro Campbell, tampoco habían logrado chantajearlo, nunca.
La puerta se abrió dejando ver el rostro de Sophia, un gesto inocente y curioso se instaló en él. Alejandro la miró con detenimiento, si ella sabía la verdad, él quería saber que estaba tramando, ¿Por qué no solo se lo decía? Se mortificaba sola, de todas formas, todo terminaría del mismo modo, él se quedaría con su hi
