bc

Viviendo Contigo

book_age16+
4.5K
FOLLOW
67.8K
READ
others
family
mate
goodgirl
bxg
seductive
like
intro-logo
Blurb

“CUARTA ENTREGA DE LA SAGA DE LOS RUIZ DE CON"

“Construir mis sueños a la par de los tuyos”

Esa fue la promesa que Luz y David se hicieron cuando contrajeron matrimonio esa tarde de primavera en Cuernavaca.

Así, después de que ambos viajaran por México cumpliendo el sueño de Luz que era viajar y tomar fotografías para crear su blog, ahora el es momento de cumplir el sueño de David Canarias, por lo que regresan a España para que él tome su puesto de Jefe de pediatría como siempre lo había deseado.

Sin embargo, los dos regresan completamente cambiados, con sueños nuevos, millones de fotos y con Sila, la hermosa niña que les robó el corazón, iniciando así la familia tan deseada por ambos.

Registrada en SAFE CREATIVE

Bajo el código: 2105087772753

TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS ©

Queda prohibida cualquier forma de comercialización, distribución, plagio, parafraseo de esta obra.

Cuenta con todos sus derechos de autor reservados.

chap-preview
Free preview
Un regreso momentáneo
Leer primero "Te Encontré" Después "Viajando Contigo"  VIVIENDO CONTIGO  POR: Ana Martínez  Registrada en SAFE CREATIVE  Bajo el código: 2105087772753 TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © ****** David  Noviembre Jalo detrás de mí la  ligera maleta mientras trato de abrirme paso entre las personas que caminan a la puerta de entrada hacia las salas de espera del aeropuerto. Al lado mío viene Luz, cargando a nuestra pequeña hija que viene entretenida con las luces y las cosas que ve alrededor mientras su madre llora, lo hace porque por un mes no nos verá y se quedará sola en México arreglando los últimos detalles para nuestro regreso definitivo a España.  Los tres entramos a la fila para hacer el registro y mientras avanzamos busco los documentos y papeles que necesito para poder sacar a Sila del país, vengo nervioso, ya que no sabemos si nos podrán alguna traba al ver que Sila es nuestra pero no tiene papeles de adopción, si no un registro directo como si Luz le hubiese dado la vida.  ―No llores alma.― Le pido mientras ella besa la mejilla de Sila.  ―Lo siento, no sé por qué estoy así, es una experiencia muy nueva para mí.  ―Lo sé, pero te prometo que en todo el mes te haré videollamadas y podrás ver a nuestra pequeñita ¿si?  El que sigue. Escuchamos a lo lejos y los tres avanzamos hacia el registro. Comienzo a darle todos los papeles, los pasaportes y lo que ella me pide. Los nervios están presentes pero al parecer, y como debe ser, todo es completamente legal y siento un gran alivio cuando la persona le pide a Luz que firme la carta de responsiva de que le está dando permiso a la pequeña de dejar el país sin ningún problema.  Luz firma, mientras me pasa a Sila que de inmediato sonríe al verme―¡Coqueta igual que papá! ― Le digo y le doy un beso sobre la mejilla haciendo que mueva todo el cuerpo feliz.  Cuando todo queda en orden, me dan los pases de abordar y oficialmente mi Sila Canarias Ruíz de Con, hará su primer viaje al que será su nuevo hogar y eso me tiene más que emocionado. Como ya tengo las manos libres, tomo a Luz de la mano y le beso la frente―¿Nos acompañas? ― Pregunto y ella asiente con la cabeza para después comenzar a caminar hacia la puerta donde todos se están despidiendo de sus familiares.  Sila, como si nada se recarga en mí como suele hacerlo y con sus ligeras manos juega con mi barba que le gusta acariciar, dándonos la imagen más tierna de todas.  ―¡Foto! ― Dice Luz emocionada y nos pone con la puerta detrás de nosotros para capturar el momento. Esta vez toma, toma dos, ya que una es de una cámara polaroid que acaba de comprarse y saca las fotos de inmediato.― ¡Perfecto! Una para mí y una para ti.― Me dice y Sila quiere tomarla de inmediato.  ―Ahora pequeña, cuando salga la imagen ¿ves? ― Le explico y ella insiste en tomarla.  Luz me abraza y una emoción me invade al tener entre mis brazos a las dos mujeres más importantes de toda mi vida.  ―La cuidas mucho, mi canallas, recuerda que te llevas lo más valioso que ambos tenemos y que su madre la extrañará mucho.  ―Te lo prometo mi Luz, la cuidaré con mi vida, y recuerda que allá estarán sus tíos y abuelos que me ayudarán con esto, en cuanto esté registrada y sus papeles estén listos te aviso, verás que regresamos más pronto de lo que nos fuimos.― Y beso su frente.  Por un momento nos quedamos así, solo los tres, disfrutando del momento, yo oliendo el aroma tan bonito que siempre Luz trae en su cabello y empezando a extrañar a pesar de que sigue a mi lado.  Sila, con esos ojos verdes nos ve atentos preguntándose qué es lo que sucede, porque sus padres se abrazan con tanta ternura en un lugar así, por lo que volteo y la uno a nosotros aún más y ella como si supiera que pasa se acurruca entre los dos.  ―¡Mi Sila hermosa! Mi niña con suerte.― Le murmura Luz.― Tengo un regalo para ti.  Luz mete la mano a su bolsa y de ella saca a “bebé” su muñeca, completamente renovada al parecer por la creadora de la misma, Ximena Caballero, que como siempre se ha dedicado a hacerle pequeños recuerdos a sus hijas y nietas, mientras a Luz le hizo una muñeca a María Julia le hizo una capa de Reina María Julia que tanto quería y que aún conserva entre sus cosas, aunque sé que también le hizo una muñeca pero que perdió tan solo se mudaron a España. Sabina, la prima, también tiene una muñeca de trapo pero la de ella se llama “Mena” en honor a su abuela.  En cuanto Sila ve a la muñeca sonríe feliz y estira la mano para que Luz se la dé.  ―¡Mira corazón! Te dieron a la legendaria “bebé”.  Cuando digo el nombre ella me ve a los ojos atenta como si comprendiera.  ―Be-bé.― Pronuncia Luz y le muestra a la muñeca.― Se llama bebé y era mía, ahora es tuya ¿si? Y quiero que la cuides mucho porque esta muñeca es muy especial. Me recordaba que siempre tenía un lugar al que debía regresar y este hogar, ahora eres tú y nosotros somos el tuyo. ― Le explica y aunque sabe que Sila está muy pequeña para entender lo hace con cariño.  ―La cuidaremos mucho ¿cierto? ―Pregunto y Sila me ve con sus hermosos ojos y sonríe.― En lenguaje Sila es un “Sí”.― Bromeo y Luz sonríe. Después la beso sobre los labios y vuelvo a abrazarla.― Te extrañaré como loco Luz, pero sólo será poquito.  ―Eso espero.― Murmura y se quita las lágrimas de los ojos.― Ahora váyanse antes de que quiera hacer una locura para que no me dejen sola.― Bromea y luego carga a Sila por última vez antes de separarnos.― Te amo mi pequeña, te amo con toda mi alma, dame un beso.  Sila le da un beso sobre la mejilla y sonríe, después toma a bebé entre sus brazos y la pega a su pecho.  ―Vente mi amor, es hora de irnos.― La cargo entre mis brazos.  ―Le pones el abrigo al llegar David, recuerda que Sila no está acostumbrada al frío de allá, no se te olvide ver lo de sus alergias y por favor no dejes que se destape en las noches, ya sabes que es muy inquieta para dormir.― Me pide.  ―Todo se hará al pie de la letra, mi amor, no te preocupes.― Le tranquilizo.  Me acerco a ella para besar sus labios y llevarme uno de sus amorosos y deliciosos besos que tanto me encantan. Nuestros labios se juntan poco a poco provocando un estallido de pura adrenalina mezclada con amor sincero que me recuerda cada día y cada noche que soy suyo desde mucho antes de saber que ya lo era.  ―Te amo David Canarias, no lo olvides.― Murmura ella aún sobre mis labios.  ―Te amo Luz Ruíz de Con, tampoco lo olvides.  Luz acaricia la mejilla de Sila y luego besa una de sus manos.― Mi niña con suerte, ahora ve a conocer por un ratito el país donde luego viviremos los tres.― Le dice y se aleja de nosotros con lágrimas en los ojos.  ―Adiós mamá, dile...― Comento a Sila que agita la mano diciendo adiós.  Así pasamos la puerta de “salidas” para irnos directamente hasta la sala de espera de nuestro vuelo. Debo admitir que me siento increíblemente nostálgico pero no me atrevía a decirle a Luz que ya estaba muy sensible por nuestra partida. Me siento así, por Sila, porque ahora que la traigo entre mis brazos me acuerdo de todas las cosas que tuvo que pasar para poder estar ahora esperando conmigo un avión que la llevaría a España, porque por un momento me pasó por la mente no regresar por ella y dejarla con su abuela Yepé y ahora estaría regresando con una culpa más y sin una hija de ojos verdes que en este momento juega con su muñeca.  ―Sé que tal vez en este momento no comprendas mucho hija mía, y que tal vez no notes la ausencia de tu madre de nacimiento porque, a pesar de que tu familia te quiere sin distinción, hay muchos rasgos tuyos que nos hacen diferentes de ti, pero lo que importa Sila Canarias es lo que todos llevamos aquí.― Y le señalo su corazón y luego el mío.― En el corazón, es lo más importante, aquí todo es verdadero si lo sientes es porque es real, y cuando te tuvimos entre nuestros brazos, eso fue lo que sentimos… ¡Amor puro y verdadero por ti! Ahora te llevaremos a un lugar nuevo mi pequeña, a un país que tu madre Yesi ni en sus sueños más locos pensó que verías, así que Sila, disfruta, aprende, ama, sé curiosa que tu madre Luz y yo nos encargaremos de apoyarte, de quererte y darte todas las herramientas para que seas muy pero muy feliz. ― Sila me da a bebé y le señala el pecho como yo lo hice con el suyo.―Así es mi vida, ahí está el corazón… veo una próxima doctora en potencia.― Bromeo y luego le doy un beso.  Escuchamos que anuncian el vuelo para empezar a abordarlos y en seguida me pongo de pie junto con ella. De pronto siento lo que Tristán sintió cuando tuvo que regresar solo a Ibiza para poder escoger el nuevo hogar para Ximena y sus hijos, una mezcla entre alegría por saber que me iría a mi país y una nostalgia increíble por dejar este.  ―Despídete mi amor.― Le digo mientras entramos al pasillo que nos lleva al avión, pero sólo por un ratito que vamos a regresar.― Y mientras Sila se acomoda en su posición favorita, camino hacia la puerta de embarque con la ilusión en la mente y mi corazón quedándose dormida sobre mi hombro. 

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook