Vorg... Lobos, Alfas, Líderes, Reyes, Gobernantes, Poderosos, Despiadados, Sádicos, Crueles y... sin ella saberlo rendidos a ella.
Los Vorg... Un apellido muy sonado en su mundo que al solo oírlo hace temblar a las personas de su mundo, sin importar que especie o ser sobre natural sea, ninguno ha sido lo suficientemente poderoso para estar sobre ellos, son quienes hacen temblar a sus enemigos y darle seguridad a su pueblo. Ha vívido varias décadas en este mundo manteniendo el respeto, admiración y miedo hacia ellos por ser sanguinarios y despiadados, teniendo una pésima reputación sobre su benevolencia.
Han vivido varias décadas de una manera sombría, sintiéndose castigados por la Diosa Luna, quien ellos creen los priva de encontrar a su mate, sin saber que es ella misma quien se niega a acercarse a ellos.
A pesar que el tiempo les exige... Tener la figura femenina, esa delicadeza que solo una mujer puede tener, nadie ha Sido capaz de obligarlos a unir sus vidas con alguien que no sea su alma gemela, que ellos anhelan. Recordando la vez que creyeron encontrarla. Sin imaginar que ella ya los encontró y se esconde entre lo que ellos menos imaginarian ella estaría.
Ella les teme, súplica a la luna nunca toparse con ellos, implora y odia con todo su ser lo que la hacen sentir. Hera es una mujer de poderes puros acerca del amor, la gratitud, la generosidad y la obsesión. Muy joven presenció la muerte de su madre así volviéndose una mujer reservada, sigue teniendo la dulzura que la caracteriza. Ama ser venerada por sus súbditos y consentida por ella misma desde que se quedó sola.
Su pueblo la ven como una mujer buena y bondadosa, quienes trabajan para ella no la ven menos así, la ven también como una mujer comprensible pero sobre todo caprichosa y abstinada.
Ella une las almas destinadas, siempre ha sido pacífica y tranquila, analiza cualquier posible escenario antes de actuar, no es hasta que la misión de encontrarle una mujer a sus destinados que llega a su manos que pierde la cabeza. Se debate entre el miedo y la negación y la razón que la orilla a conseguirle sus destinadas la vuelve aún peor.
Siempre ha sabido que esos hombres crueles de quienes protege a su pueblo son suyos pero nunca ha pisado territorio desconocido, conociendo casi todo de ellos.
Su frialdad, su crueldad y su sadismo.
La monarquía cree que los reyes y guerreros del poder deben sentar cabeza y que mejor que una mujer que amén sienten su cabeza, recurren a una alma fiel al amor verdadero.
La reina Hera
La furia de la reina Hera ante está petición sorprende a todos así investigando la razón de su furia, que la obliga a hacerles cara a los hombres que está destinada que aunque observa obsesivamente desde las sombras también les teme pero no está dispuesta a seguir viendo cuántas mujeres diferentes duermen en casa de sus destinados como si nada cuando ellos son de ella.