Por navidad cenamos en familia, fue la primera que pasé sin Gemma y se me hizo raro, porque fue mi primera navidad con Isaac, con Olivia en brazos y con Marienne, pero estuvo bien y fue bastante agradable la velada. Olivia no dejó de llamar a Isaac y me parece que Marienne estuvo a punto de llorar cuando la escuchó.
—¡Papá! —le llamó desde las escaleras.
Isaac fue bastante comprensivo con mis miedos de madre a que Olivia se hiciera daño, así que pusimos dos puertas anti bebés en lo alto de las escaleras y al principio de ellas. También le pusimos protectores a las esquinas de la casa y ajustó algunos tiradores para que no estuviera abriendo cajones y sacando cosas a cada rato.
—¿Ha dicho...? —dudó.
Yo la miré. Estaba parada junto a la encimera de la cocina y con las manos en la boca
