Aleksei Morozov
Desperté en la casa de San Petersburgo con el cuerpo dolorido, recordaba a detalle la explosión que casi me lleva a la muerte de no ser porque caí en el capó de una camioneta y mis hombres me sostuvieron a tiempo, pero bien sabía que las heridas me dejarían en reposo un par de semanas a lo mucho. Sin embargo, lo preocupante del asunto era que ese infeliz de Ivanov se había llevado una cuantiosa mercancía que debíamos recuperar a como dé lugar, así como también debíamos descubrir su paradero y darle fin cuanto antes.
—Por fin despiertas —comentó Nika ingresando a la habitación con una bandeja de comida—. Esperaba que hoy lo hicieras, el doctor dijo que solo necesitarías descansar y por lo visto tenía razón.
—¿Hay noticias de Ivanov?
—¿De verdad es lo único que te preocupa? ¿No te interesan tus fracturas, la contusión en tu cabeza o las quemaduras? —cuestionó tan desconcertada como fastidiada, aunque esto no era nuevo en mí.
—¿Hay noticias o no?
—No, malhumorado, pero sí hay otras noticias.
—¿Qué pasó?
—Nicolay ya le informó a Vicky su decisión y hace unas horas ella arribó a Moscú.
—¿Y qué dijo de la condición impuesta por él?
—Ya imaginarás lo bien que se lo tomó —exhalé con pesadez a sabiendas de la tormenta que se avecina—. Alek, ¿estás seguro de esto? Quizás lo mejor sea que nos dividamos el trabajo y encontremos un punto de equilibrio.
—Gracias por tu preocupación, pero son órdenes de Nicolay y no las desobedeceré aun si eso me trae discusiones con su hija.
—No entiendo cómo toleras tanto… Quizás la amas más de lo que pensamos… —susurró lo último creyendo que no la escucharía, mas fue la tristeza en sus palabras lo que me afectó.
—Nika, necesito que hagas algo por mí.
—Lo que sea.
—Debes trabajar como doble agente a partir de hoy —su desconcertante mirar me hizo sentarme pese al dolor que sentía por las costillas rotas—. Necesito que te quedes muy cerca de Vicky y me informes de cada paso que dé sin que ella lo sepa.
—¡¿Por qué no acaban esta ridícula guerra de una vez?! —exclamó irritada— ¡Es obvio que se gustan desde niños y no hay mejor hombre para ella que tú!
—Ella no piensa igual y yo no puedo someterme a una ilusión por mucho que la ame, pero no por eso abandonaré a nuestra familia ni la dejaré desprotegida.
—De verdad que tienes una lealtad impresionante a esta familia.
—Más de la que imaginas, pero ¿podrías hacerme ese favor?
—Te he ayudado muchas veces y sabes que esta no será la excepción —ella se aferró de mi mano devolviéndome la calma.
—Gracias, sé que te pongo en muchos aprietos, pero tu ayuda significa mucho para mí.
—Para eso son los amigos, aunque no entiendo por qué hacerme esta solicitud si sabes que te ayudaré como en pasadas ocasiones.
—Porque esta vez el juego ha cambiado.
—Si lo dices porque Vicky será quien gobierne…
—No es solo eso —interrumpí fastidiado—. Sé que Ivanov hará algo para acercarse a Vicky y necesito entrar y salir por la puerta trasera sin que ella se dé cuenta, en tanto, tú la cuidarás por mí y me informarás de cada movimiento, así sabré cómo mantenerla alejada de Ivanov.
—¿Crees que la asesine?
—Estoy seguro de ello.
—Alek, ¿A qué se debe ese odio de Ivanov por ti? Porque no me negarás que te odia con pasión —suspiré acongojado recordando el hecho.
—Porque yo asesiné a su hermano…
—¿Tú? —preguntó confundida— ¿No se supone que Nicolay y Ragnar se hicieron cargo de los Ivanov hace años?
—Los Ivanov tenían otro hijo… —la sorpresa se marcó en ella, entonces creí que, quizás, si le decía la verdad, Nika no dudaría en ayudarme en todo lo que necesitara…
Hace como cinco años (cuando se supo del embarazo de Lily), Vicky, Nika, mi padre y yo quedamos al frente de la organización ya que Nicolay no se encontraba en las mejores condiciones. Fue en ese momento cuando mi padre me contó cómo obtuvo Nicolay el poder y cuáles fueron las familias que derrocaron, así que, un día que estaba aburrido, quise investigarlos para saber quiénes eran y a qué se dedicaban, pero fue en medio de esa investigación que encontré un dato clave que sabía cambiaría el rumbo de todo.
Los Ivanov tuvieron tres hijos: el primero murió a manos de Ragnar, el segundo salió con vida sin que nadie se diera cuenta y se unió a otro grupo como peón, pero el tercer hijo se encontraba en manos de otros familiares que se encargaron de criarlo bajo el apellido materno, razón por la que nadie dio con él. Sin embargo, el hecho de que Serik siguiera con vida (y muy seguramente con ganas de vengarse) no era mi mayor preocupación, sino que su hermano estudiaba en la misma escuela que estábamos Nika, Yuliya, Vicky y yo, y no solo eso, sino que ese infeliz cortejaba a Vicky desde hacía un buen tiempo.
Ante esto, decidí seguirlo sigiloso y descubrí que los hermanos estaban de nuevo en contacto, razón que me hizo desconfiar más de ese sujeto a sabiendas de que Vicky estaba con una rebeldía incontrolable en la adolescencia y como Nicolay estaba sumido en la depresión por Lily, no había quien controlase la correa. Fue así que me armé como pude y cité al susodicho a las afueras de la ciudad haciéndome pasar por Vicky, y tal como imaginé, él llegó con su hermano al lugar, hablaban sobre cómo acabarían con ella en venganza por lo que le hicieron a los Ivanov, así que una vez obtuve la grabación con su confesión, salí silencioso de mi escondite, apunté al menor e impacté dos balas en su cráneo que le dieron fin al instante.
Cuando pasé a Serik, la situación cambió por completo ya que él tenía entrenamiento e iba armado, por lo que entramos en un combate a muerte hasta quedarnos sin balas, aunque yo dejé una como garantía) y de ahí fue cuerpo a cuerpo. De esta pelea me llevé algunas cicatrices en el abdomen cuando él sacó una navaja de su tobillo, pero no me rendí, no estaba a dispuesto a permitir que asesinara a Vicky, entonces, en cuanto pude dejarlo bocabajo, lo ahogué en la nieve hasta que dejó de patalear y saqué el arma, estaba dispuesto a perforar su cabeza, pero las sirenas de la policía me distrajeron consiguiendo que impactara cerca de su columna y eché a correr sin descanso creyendo que él estaría muerto.
—¿Y cuándo supiste que Serik seguía con vida?
—Cuando Yuliya fue secuestrada.
—¿Q-Qué…?
Fue inevitable que ambos no recordásemos el trágico desenlace de ella y más porque fue secuestrada, luego la torturaron y violaron múltiples veces y finalmente murió desangrada por empalamiento…
—¿Recuerdas que casi no salgo con vida? —asintió estupefacta—. Bueno, yo encontré su cuerpo empalado y quise sacarla del lugar, pero fui emboscado por Luzhin y sus hombres. En aquel momento no sabía que trabajaba con Bael, creí que había sido idea suya y confundió a Yuliya con Vicky por el parecido que tenían, pero confirmé con Luzhin que Serik seguía vivo y sería cuestión de tiempo cuando supiese que ese cadáver no era el de Vicky.
—Entonces deberías decírselo, ¡ella está en peligro!
—¡No! —sujeté fuerte su muñeca evitando que saliera—. Yo provoqué esto, es mi cabeza la que quiere Serik y no descansará hasta obtenerla.
—Pero también quiere a los Romanov y es obvio que no descansará hasta vengarse de todos.
—Lo sé, por eso necesito terminar lo que empecé hace años, por eso debes quedarte con Vicky para resguardarla de todo peligro en mi nombre o no me quedaré tranquilo, Nika —ella dudaba y se notaba cuánto quería correr para contárselo—. Te lo suplico, he cargado con una culpa enorme por lo que le hicieron a Yuliya. Ella, tú y Vicky eran inseparables y por mi culpa la asesinaron, ahora permíteme resarcir un poco ese daño.
—Solo respóndeme algo, ¿Serik sabe que Vicky está viva?
—Es probable, ahora que ella ha tomado el control de Rusia, su nombre resonará en cada rincón y quizás para esta hora ya lo sepa.
—De acuerdo —suspiró resignada—, te ayudaré, pero debes mantenerme informada de cada paso que des, porque ni creas que te dejaré morir a manos de ese lunático… Solo de recordar lo que le hicieron a Yuli… —cerró sus ojos con impotencia y presioné su mano atrayéndola a mí.
—Juro que pagarán por lo que hicieron, pero debes guardar silencio e informarme todo, Nika, porque ambos sabemos que Vicky intentará escabullirse de mí.
—Lo sé y no te preocupes, ya te dije que lo haré, solo no me dejes de lado.
—¿Bromeas? Tú eres la mejor aliada que tengo para controlar a esa niñita malcriada —una risa cómplice inundó la habitación.
—Di lo que quieras, pero ella te tiene loco desde que estuvieron juntos.
—No, Nika, ella me trae comiendo de su mano desde que la conocí, el tiempo solo hizo que la apreciara y la amara más, y ese encuentro ha sido el más significativo para mí porque desde entonces le dejé mi corazón.
—¿Solo en ese encuentro? —preguntó con picardía, haciéndome reír avergonzado.
—En todos me entrego a ella con el corazón.
—¿Y por qué no luchas para estar con ella en vez de seguir ese ridículo juego?
—Tenía planeado hacerlo, pero ahora que es la cabeza de Rusia, solo sería el hazmerreír y todos creerían que estoy con ella por el poder.
—Lo dudo, pero es tu decisión.
—Y te agradezco por respetarla, así como aprecio tu apoyo.
—Descuida, solo hazme dama de honor en la boda y la madrina de todos sus hijos, con eso me contentas.
—Deja que primero consiga su amor y ya hablaremos del resto.