09

1297 Words

Sus ojos me observan de forma seductora mientras ella se sienta, debo controlarme para no lanzarme sobre ella. Es bellísima siempre lo he pensado. -    Alexander no puedo atenderte – comienza a decir – espero a un cliente -     Soy yo – le respondo sentándome – si hubiera pedido la cita con mi nombre no hubieras aceptado verme -    En eso tienes razón – me dice señalándome - ¿Qué quieres? -    ¿a qué vienen los clientes a tu empresa? – preguntó sarcástico riendo. -    Idiota – me responde tratando de mantenerse sería.   -    Quiero que te encargues de la decoración de mi ático y de una mansión a las afueras - digo y ella toma su agenda y comienza a tomar notas. -    Voy a poner a mi mejor... - comienza, pero la interrumpo. -    Parece que no me escuchaste – digo y ella mira curios

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD